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Publicado originalmente en Pulso, La Tercera (23.09.2020).
Chile es el principal país en el hemisferio sur dedicado a la exportación de fruta fresca, con cerca de 4000 millones de USD en ventas por año, por lo que su industria presenta constantes desafíos para contar con un producto de calidad, que llegue en las mejores condiciones a su lugar de destino. Tan relevante es esta industria para Chile, que supone el 2,9% del PIB nacional en la economía.
Frente a la intención de liderar la industria mediante la innovación, nació Shel-life, la primera cobertura 100% natural y orgánica para extender la vida de la fruta fresca. Completamente libre de cualquier aditivo químico sintético que se encuentra en los productos tradicionales, Shel-Life fue concebido utilizando todos los ingredientes y componentes naturales, polímeros vegetales extraídos sin ningún tipo de aditivos que preservarán y extenderán la frescura de la fruta manteniéndola fresca y sabrosa, proporcionando su sabor y nutrientes naturales.
Con un producto específico para alargar la vida de manzanas, naranjas, limones, ciruelas, nectarines, palta, entre otras frutas, el invento fue desarrollado, patentado y lanzado en 2016 como un elemento sin precedentes.
Shel-Life supera esencialmente a todos los demás productos disponibles en el mercado, ya que está hecho con ingredientes totalmente naturales y vegetales que aseguran el bienestar de los consumidores. En los últimos años, ha revolucionado a la industria del packaging de manera sustentable y preservando los productos del agro.
Francisco Palma, fundador de PolyNatural, la empresa detrás de la investigación de Shel-Life, relata que la innovación surge de una investigación doctoral para extender la vida útil de los salmones de exportación, que terminó decantando en frutas frescas.
Al equipo de PolyNatural, empresa respaldada por el fondo CLIN de ChileGlobal Ventures, área de capital de riesgo de Fundación Chile, les tomó 5 años lograr un producto, concebido como el resultado de una extensa y minuciosa investigación científica utilizando múltiples propiedades encontradas en ciertas plantas andinas.
Parte del equipo de Poly Natural, la empresa detrás de la investigación de Shel-Life.
En palabras simples de su creador, lo que el aditivo consiguió fue aplicar un spray natural en la fruta, tras su cosecha, generando una segunda cáscara y reduciendo el “Fruit waste”, es decir, la pérdida de fruta mediante el control de deshidratación y creación de microorganismos, pudiendo ahorrarle a los productores entre un 20% y un 25% de su producción. “Aplicar el producto para los exportadores chilenos hace mucho sentido”, asegura Palma.
Actualmente, Shel-Life está siendo aplicado continuamente por exportadoras nacionales en frutas convencionales y orgánicas, las cuales han sido enviadas a distintas latitudes del mundo, cumpliendo con el desafío de mover grandes producciones hacia otros países.
Palma relata que PolyNatural se está transformando en una empresa global, aumentando sus operaciones en Argentina, Perú, Colombia y México. Además, ya aprobaron las primeras versiones del producto en las frutas de una cadena de supermercados alemana, con miras a aplicar el producto en otros locales comerciales de Europa.
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